Cuarenta invitados llenaron de cariño la casa de la familia Angus Arza, ya que pudieron ser testigos del enlace matrimonial, después de 26 años, de los padres de Anabel Angus, la reina del Carnaval cruceño. Todos los seres queridos aportaron con la realización de esta romántica unión, incluso Anabel, que estuvo encargada de los centros de mesa, el vestido y el buqué.
Maribel, la hermana de la reina, se llevó las flores de la novia y Marquito, el cortejo, la rosa que lanzó el novio. ¿Presagio? No lo sabemos, lo que sí sabemos es que la orgullosa hija se lleva no solo un bonito recuerdo, sino el gran ejemplo de perseverancia, amor y paciencia que sus padres se encargaron de mantener.
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